Seguramente no lo saben a ciencia cierta, pero seguramente lo sospechan: No soporto el flash* embebido, incrustado o empotrado -ya sea bajo coacción o no- en las páginas web como norma general y en los blogs como capitán-general**. Algún día dare una lista más detallada de lo que no soporto en un blog y algún día haremos una página homenaje a la Web 1.0 o Web Geocities. Mientras tranto se tendrán que conformar con visitar espacios aleatorios de myspace para hacerse una idea.
Todo esto venía a algo que ya no recuerdo… ¡ah!, ¡ya! Venía a disculparme de antemano por un link a una animación flash* con la excusa de que es prácticamente texto, que es un link externo y para que sepan ustedes que las cosas que yo no soporto son las cosas que yo no soporto en los demás. Y dicho esto, entérense ustedes de todo los entresijos del cunnilingus en Korea del Norte.
Y para que luego no me digan*** que aprovecho cada enlace para poner un post, aquí tienen ustedes otro que les puede entusiasmar si son fanáticos de Groucho Marx y que merece la pena aunque solo sea por la entrevista que tiene colgada en uno de sus últimos posts (en flash*, por cierto).
Y como no podía ser de otra forma la frase que acaba este post es una referencia cultural, o no:
¡Apaga el ordenador y vete a la cama!
* O el flan como denominan algunas viejunas al fogonazo de luz que a veces arruina la toma de una fotografía: – Le he dado al botón, pero no ha salido el flan, niño.
** Ríanme las gracias, que hoy lo necesito y no les va a pasar nada.
*** Que no me lo han dicho nunca, por otro lado.
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